La depresión es una condición de salud mental en la que el individuo experimenta una sensación constante o inquebrantable de tristeza y falta de interés por las cosas que antes disfrutaba. También conocido como trastorno depresivo mayor o depresión clínica, este trastorno afecta a la forma de sentir, pensar y comportarse, y puede contribuir a muchos otros problemas de salud física y mental. Las personas que sufren depresión pueden tener problemas para seguir adelante con la vida cotidiana y a veces pueden sentir que no vale la pena vivir.
La depresión no es sólo “sentirse triste”, y ciertamente no es una debilidad de carácter. Las ideas erróneas y la estigmatización hacen creer a la gente que, con suficiente fuerza de voluntad, una persona deprimida puede simplemente salir de su depresión. Por el contrario, la depresión puede necesitar un tratamiento a largo plazo. La buena noticia es que, con la forma correcta de tratamiento y una combinación de opciones terapéuticas, la mayoría de las personas se sentirán mejor.
¿Qué es la depresión mayor?
La depresión puede afectar a cualquier persona, independientemente de su edad, sexo y origen, pero todavía no existe un conocimiento común de los síntomas asociados a la depresión. Esto puede llevar a que la enfermedad pase desapercibida y no se trate en algunas personas, por lo que éstas no son conscientes de las opciones de tratamiento de que disponen.
Por esta razón, es útil que las personas que viven con depresión, así como sus amigos y familiares cercanos, entiendan con precisión la depresión en sí misma, así como los riesgos a largo plazo que plantea si no se trata a tiempo.
Cada persona que vive con depresión es única, al igual que el trastorno. Para algunas personas, la depresión es un trastorno que puede ocurrir sólo una vez en su vida, pero la mayoría de las personas suelen experimentar múltiples episodios. Durante estos episodios, los síntomas pueden aparecer a diario y durante una parte importante del día.
Algunos de los principales síntomas de la depresión mayor son
- Sensación de vacío y falta de esperanza
- Cansancio extremo
- Pérdida de apetito
- Atracones de comida
- Pensamientos oscuros muy frecuentes
- Lucha por levantarse de la cama
- Pensamientos intrusivos sobre la muerte y el morir
- Ideación suicida y, en algunos casos, intento de suicidio
¿Cuáles son los riesgos de una depresión mayor no tratada?
La conexión social y el apoyo de los miembros de la familia o los amigos es una parte crucial para mantener el bienestar físico y mental. Si usted o alguien que conoce vive con una depresión no tratada, es probable que se haya aislado o que sus relaciones se estén resintiendo.
La depresión no tratada también puede dificultar el desarrollo de nuevas relaciones o el acercamiento a los demás. A menudo, para alguien que atraviesa un episodio depresivo grave, la sola idea de mantener una conversación con alguien puede resultar aterradora y difícil.
Sin un tratamiento adecuado, la depresión puede hacer que los individuos se vuelvan cerrados o antisociales. El resultado suele ser un bajo rendimiento laboral o escolar y la pérdida de relaciones personales.
Esto también puede convertirse en un círculo vicioso, ya que se ha comprobado que la soledad y el aislamiento aceleran la aparición de la depresión. Por este motivo, abordar el aislamiento social podría ayudar a reducir los riesgos de depresión mayor.
Consecuencias físicas de la depresión no tratada
La depresión no sólo afecta a la mente: tiene graves implicaciones para la salud física que, si no se tratan, corren el riesgo de aumentar.
Estos problemas de salud pueden incluir:
- Problemas gastrointestinales
- Problemas de sueño
- Enfermedades del corazón
- Peso corporal bajo o alto
- Dolor físico crónico
- Sistema inmunitario debilitado
Sufrir una depresión severa puede afectar a la capacidad de una persona para levantarse de la cama, lo que la hace incapaz de satisfacer sus propias necesidades básicas. Cuando no se satisfacen nuestras necesidades de cuidado personal, higiene y nutrición, nos volvemos vulnerables a otras enfermedades. También se cree que las personas con depresión responden peor al tratamiento de otras enfermedades.
En algunos casos, la depresión puede llevar a la ideación suicida o a llevar a cabo un acto de suicidio. Si usted o un ser querido viven con depresión y le preocupa la seguridad de la vida, póngase en contacto con alguien que pueda ayudarle hoy mismo.
Un día en la vida de: Trastorno depresivo mayor
Una de las cosas más difíciles de la depresión es lo incomprendida que está como enfermedad. Aunque en los últimos años se habla más de la salud mental, sigue habiendo estigmatización en torno a las enfermedades mentales, incluida la depresión. En algunas culturas y grupos demográficos, no es la norma hablar de las emociones y los sentimientos. La falta de conversación y, en algunos casos, el tabú en torno a la mención de la enfermedad puede hacer que muchas personas vivan con una depresión no tratada. Esto supone el riesgo de que su situación se deteriore, provocando un empeoramiento de los síntomas o un intento de suicidio.
Aunque la depresión es muy común, la gente tiende a desconocer la forma en que se manifiesta la enfermedad o lo grave que puede ser. Para alguien que vive con depresión, llevar a cabo las funciones cotidianas, como levantarse de la cama, ducharse y comer, puede resultar extremadamente difícil. Los niveles de energía tienden a ser muy bajos y, por lo tanto, mantener un trabajo, completar las tareas escolares y mantener las relaciones puede ser extremadamente difícil. Esto puede crear un ciclo de negatividad, aislamiento y soledad.
Cuidar la salud mental
Para quienes viven con una depresión mayor es crucial buscar ayuda profesional. Hay una serie de opciones de recuperación que pueden incluir la medicación, la terapia de conversación tradicional, la terapia familiar y las opciones alternativas. Además, hay ciertas cosas que hay que hacer para cuidar de su bienestar, tanto durante los episodios depresivos como cuando se siente bien.
Técnicas como la meditación pueden ayudarle a mantener una perspectiva más positiva. La autohipnosis también se recomienda para reducir el estrés y mejorar el sueño. Intentar mantener una dieta equilibrada y seguir una rutina diaria puede ser muy, y se ha demostrado que el ejercicio mejora notablemente el estado de las personas que viven con depresión.
EMT para el tratamiento de la depresión
La buena noticia es que existen muchas opciones de tratamiento para ayudarle a superar la depresión mayor. La psicoterapia y el tratamiento asistido con medicación han demostrado ser eficaces para muchas personas. Sin embargo, en algunos casos, la depresión es resistente a estos tratamientos. En estos casos, la terapia de estimulación magnética transcraneal (EMT) puede ser la respuesta.
La estimulación magnética transcraneal es un tratamiento aprobado por la FDA para personas que no han respondido a otros tratamientos. La EMT es una forma segura y no invasiva de estimulación cerebral.
El objetivo de la EMT es dirigirse a las zonas cerebrales afectadas y despertar o calmar la actividad de las células cerebrales en zonas específicas. En comparación con otros tipos de estimulación cerebral, la EMT solo se dirige a la parte afectada del cerebro y no requiere anestesia ni hospitalización.
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